No te preocupes si tus hijos se aburren durante tus vacaciones en Barcelona: la capital catalana tiene muchas actividades divertidas y sitios interesantes que toda la familia puede disfrutar. Nuestra lista te ofrece algunas de las mejores cosas para hacer en Barcelona con niños.
10 actividades en Barcelona para hacer con los niños
1. Las atracciones del parque de atracciones Tibidabo
Tibidabo es el nombre de la colina más grande que rodea Barcelona y alberga uno de los parques de atracciones más antiguos del mundo. Cuenta con montañas rusas, autos chocadores, una noria y muchas otras atracciones divertidas. La vista también es espectacular, ya que a sus pies se encuentra toda la ciudad.
2. Ver tiburones de cerca en el Acuario de Barcelona
“L’Aquarium” de Barcelona es uno de los más grandes de Europa. Alberga cientos de animales marinos diferentes del mar Mediterráneo y del resto del mundo, los más famosos de los cuales son sus feroces tiburones.
Para disfrutar de un espectáculo muy especial, puedes visitarlo durante la hora de comer y ver a los cuidadores del acuario sumergirse en el tanque y alimentar a los tiburones y otras criaturas.
3. Piérdete en el Parque del Laberinto de Barcelona
El Parque Laberinto de Horta– es el parque urbano más antiguo de Barcelona. Como sugiere su nombre, lo más destacado es el laberinto de plantas esculpidas en el centro, que puedes explorar (¡y perderte en él!).
El Parque del Laberint no es tan conocido como otros parques importantes de Barcelona, lo que lo convierte en un buen lugar para visitar, ya que suele estar menos concurrido.
4. ¡Ve al zoológico!
¿A quién no le encanta ir al zoológico? Vea elefantes enormes, jirafas altas, leones majestuosos, loros coloridos y docenas de otros animales. También hay una zona de mascotas, donde los más pequeños pueden montar en ponis y ver y tocar muchos animales de la granja de cerca.
5. El chocolate es más que comida en el museo del chocolate de Barcelona
¿Sabías que Barcelona tiene un museo del chocolate? Ven y conoce la historia del chocolate, cómo se produce y contempla las increíbles Mones de Pasqua, esculturas de chocolate que se regalan a los niños en Semana Santa. ¿Y qué sentido tendría un museo del chocolate sin chocolate para comer? Visite la cafetería para tomar una taza de chocolate caliente y bombones después de su visita.
6. Explora el museo de cera de Barcelona
El Bosc de les Fades, que significa El Bosque de las Hadas, es parte del museo de cera de Barcelona: es una réplica a tamaño real de un bosque mágico con árboles vivos, hadas y otras criaturas mágicas. También hay un bar, donde puedes comer algo en un ambiente que parece sacado de una película de fantasía.
7. Date un chapuzón en La Torre de les Aigües
Si quieres bañarte en un ambiente más relajado y con mucha sombra dirígete a La Torre de les Aigües – la torre de las aguas. Ubicado en el centro de la ciudad, es un pequeño parque urbano con una piscina pública, areneros para jugar y muchos árboles, bancos y sombra para refrescarse. El parque es un pequeño, frecuentado por los lugareños, por lo que el ambiente es mucho más tranquilo que en la playa.
8. Dar un paseo en un viejo tranvía
El Tramvia Blau del Tibidabo –El Tranvía Azul del Tibidabo– es un vestigio del pasado de Barcelona, un tranvía eléctrico que te llevará hasta la base de la colina del Tibidabo. El viaje es corto, pero todos los coches conservan la misma apariencia que cuando entraron en circulación por primera vez hace más de cien años, pintados de azul brillante con encantadores interiores de madera antiguos.
Cuando llegues al final de la línea podrás visitar el CosmoCaixa, el museo de ciencias de Barcelona, o tomar el funicular hasta la cima del Tibidabo, donde podrás disfrutar de las espectaculares vistas y visitar el parque de atracciones.
9. Vea el puerto de Barcelona de cerca en Las Golondrinas
Las Golondrinas son barcos turísticos que te llevarán a dar un paseo panorámico por el puerto de Barcelona. Observa los superyates, los cruceros y los enormes cargueros y petroleros que atracan en Barcelona todos los días, así como el paisaje de la ciudad desde una perspectiva diferente. Los barcos incluso tienen fondo de cristal, por lo que puedes mirar hacia abajo y ver bajo el agua.
10. Recorrer el paseo marítimo
